jueves, 27 de abril de 2006

Panel "Realidad Social Peruana: Otra Mirada" organizado por la PUCP de Lima


FILÓSOFOS Y CIENTÍFICOS SOCIALES TRATAN DE EXPONER ENFOQUES ALTERNATIVOS SOBRE LA REALIDAD PERUANA

Intelectuales concluyen que pensamiento social en el Perú debe, por lo menos, reorganizarse para abordar con eficacia los problemas que nos agobian desde hace cinco siglos

[Lima-UNMSM, 27 de abril de 2006] La Facultad de Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica de Lima tuvo la suerte de recibir, este jueves 27 de abril, a importantes científicos sociales, analistas y filósofos peruanos. Esto, en el panel denominado "Realidad social peruana: otra mirada", que organizó el

Centro de Investigaciones Sociológicas, Económicas, Políticas y Antropológicas (CISEPA) de esa casa de estudios.


En efecto, de acuerdo a lo ya anunciado[1], en este panel intervinieron los siguientes profesionales: Guillermo Rochabrún Silva[2]; Juan Fernando Vega Ganoza[3]; Walter Twanama Altamirano[4]; José Carlos Ballón[5]; y Eduardo Cáceres Valdivia[6]. En ese orden, expusieron sus puntos de vista, moderados por Augusto Castro Carpio, presidente del CISEPA.

Guillermo Rochabrún: “Es necesario crear imaginarios sociales edificantes”.
Empezó Rochabrún, opinando que las ciencias sociales en el Perú se han manejado siempre en el horizonte de un "pensamiento crítico" nulamente aplicable. La realidad peruana se ha descrito siempre en sus aspectos negativos, tanto desde una comprensión determinista (se piensa que estaríamos marcados por un destino difícil de salir) como historicista (se concede peso abrumador al pasado frente al presente).

En términos culturales, siempre hemos construído una memoria histórica debilitante (todo lo contrario de los EE. UU, y la creencia en el "destino manifiesto", que los hace autopercibirse como el "país de las oportunidades"), y esto ha redundado en una perspectiva fatalista[7]. Es decir, se construyen imaginarios desoladores, donde no hay márgenes de maniobra [como si estuviéramos en un “callejón sin salida”... FR].

El mismo Jorge Basadre (historiador tacneño, 1903-1980) cae en dicha lamentación por un pasado que se considera determinante[8]. Con todo, el "principio esperanza", que habita en su obra[9], permite considerar (por extrapolación) el tema de las oportunidades que efectivamente hemos aprovechado. ¿No podemos preguntarnos esto, y dejar de pensar que estamos en el peor de los mundos posibles? Aquéllo abriría nuevas posibilidades de reflexión sociológica.

En este sentido, otro intelectual peruano, el historiador Pablo Macera, utiliza un "razonamiento contrafáctico" distinto al de la metodología del pensamiento crítico, preguntándose por alternativas a nuestros procesos históricos[10]. En estas preguntas se revela que la suerte no está echada de antemano. Un horizonte de posibilidades se abre, lo cual nos permite pensar creativamente nuestro futuro desde el presente.

En esa línea, debemos preguntarnos, afirmó Rochabrún, por las experiencias históricas exitosas que nos hayan dejado recursos con los que podamos contar. Sólo así nos convenceremos de que hay opciones y posibilidades de elegir, que no son meramente electorales[11]. "La cuestión es mental", concluyó, aludiendo a la necesidad de crear nuevos imaginarios.

Juan Fernando Vega: “Las políticas de inclusión no son el problema, si no el contexto cultural en que se llevan a cabo”.
La ponencia de Vega estuvo llena de datos estadísticos, pero no por ello disminuyó el interés. Señaló que en los sectores académicos de nuestro país hay toda una "narrativa social" que se ha quedado en los años 40. Es un error considerar que hoy el Estado peruano es excluyente, y que no llega a la población, cosa tal vez cierta en aquellos años, pero no ahora.

En realidad, el Estado ha promovido, durante las últimas décadas, políticas de inclusión[12]. Sin embargo, al considerar el problema desde una perspectiva cualitativa, nos podremos dar cuenta que la inclusión no ha sido suficiente. El sistema, que tiene como núcleo el aprendizaje, ha aumentado la inversión en educación (aumentando el sueldo a los maestros, por ejemplo) y cuenta con una amplia estructura tanto a nivel público como privado, pero no ha sabido promover la reflexión y el debate pedagógico entre los actores educativos.

En efecto, ni profesores cuenta de la realidad paradójica de un país con un alto porcentaje de aprobación académica y que, ni alumnos, ni padres de familia, ni funcionarios públicos quieren darse sin embargo tiene una pésima comprensión lectora y matemática[13]. "¿Ignorancia de la realidad educativa? ¡Pero si todos saben el problema!", comentó Vega[14].

¿A qué se debe esta actitud? Debemos comprender que, a pesar de haber aumentado el presupuesto para la educación (lo cual no ha redundado en una mejor comprensión), y de estar en la mitad de camino en la competencia académica internacional (y que, por lo tanto, no "estamos peores que Haití", como se dice), desde 1940 hemos iniciado un proceso de "inclusión" de una cultura oral ágrafa-rural a otra ágrafa-urbana, con toda la problemática que esa situación implica[15]. "En ese sentido, estamos más cerca de Sudáfrica, que de nuestros países vecinos" aseveró.

Walter Twanama: “No se ha estudiado con claridad la eticidad pública del peruano”.
Prosiguió Twanama, señalando que en las ciencias sociales peruanas hay un obnuvilamiento por el ejercicio mecánico del pensamiento "crítico", pero no se abordan los problemas derivados de la eticidad pública en el Perú[16].

Por lo mismo, en las investigaciones de las ciencias sociales peruanas, una vez establecido que nuestras problemáticas relaciones sociales no se explican por la tesis del desconocimiento mutuo[17], ha faltado describir la particular habilidad que tenemos para construir "patrones de discriminación": a partir de una rápida inspección de las características externas de un interlocutor (rasgos físicos, nivel educativo, usos lingüísticos, etc.), sabemos si podemos tener una actitud de respeto prudente o de menosprecio racista con él[18]. Esto constituye nuestra eticidad, ignorada por los sociólogos.

Esta actitud, puesta en práctica y desarrollada desde el inicio de las migraciones internas, “constituye un progreso” –señaló Twanama- en comparación con el desconocimiento absoluto de las características del prójimo: en estos patrones de diferenciación existe, por lo menos, una "referencia a los otros"[19], de ayuda enorme en una sociedad fragmentada y semi-moderna.

Al final de su intervención, Twanama llamó la atención a los científicos sociales peruanos, por no tematizar esta "capacidad cognitiva" que caracteriza la eticidad del peruano. Influenciados por aplicaciones mecánicas del marxismo, se habrían limitado a hacer un análisis estructural-clasista que no aprehendería la complejidad de los hechos. Por el contrario, deberían aprender a mirar la "lógica" de cada interacción social, y esto les haría llegar a mejores conclusiones [que desnuden la intencionalidad estratificante de la mirada del peruano... FR].

José Carlos Ballón: “Nuestra sociedad ha sobrevivido a través de sistema de alianzas entre grupos heterogéneos”.
El filósofo sanmarquino criticó -al momento de su intervención- que el título del panel inste a "empezar de cero", y no reconozca lo que ya tenemos, como si no quisiéramos "acumular capital ideológico". Una visión culturalista que no es la más adecuada. En contraposición, podríamos tener una actitud más de sentido común: hay que partir de lo que hay, no de lo que no hay (lo que supuestamente "debe" ser), ni de lo que pudo haber (como postula el pensamiento contrafáctico), y empezar a construir nuestras teorías sin afán de totalidad, para descubrir los distintos matices de nuestra compleja realidad social.

En efecto, según Ballón, no tendría sentido buscar una gran teoría que explique el “alma” del Perú, queriendo buscar “la unidad del mundo en la punta de un lápiz”. En realidad, las teorías son sólo locales, y nada tienen que ver con proyectos metafísicos de construcción de metarrelatos. Pensar lo contrario es lo causante de nuestra actual frustración.

Si nos alejamos de estas pretensiones omniabarcadoras, podríamos descubrir que, al lado de tantas rupturas, hay una convivencia de larga duración, que viene por lo menos del período de estabilización colonial[20]. Y en estas condiciones, no habría que avergonzarse por la crítica de Víctor Andrés Belaúnde, que refiere que la sociedad peruana se caracteriza por la incoherencia. "Sería un error pedirle a las personas que sean coherentes: eso sólo se lo pedimos a las teorías. ¡Y las sociedades no son teorías!", exclamó Ballón[21].

Instó, por último, a realizar un estudio multidisciplinario de la llamada "cultura chicha" (para él, una fuente de creatividad y de reconstrucción social única en su género), sin prejuicios ni desprecios fundamentalistas.

Eduardo Cáceres: “Es necesario lenguaje común para las ciencias sociales”.
La exposición de Cáceres fue sintetizadora. Hizo referencia al proceso del pensamiento social peruano, y sus tres enfoques: desde la economía (con la diferenciación entre lo estructural y lo supraestructural); desde la política (en el que se privilegian los procesos, estructuras y actores políticos); y desde las mentalidades (donde el tema de la subjetividad y las motivaciones psicológicas es relevante en el análisis de los procesos sociales)[22].

Aunque esto es difícil de identificar, parece que en la actualidad se intenta hacer investigaciones mediadas por una intencionalidad sanamente ecléctica[23]. Se tratan, en este contexto, tres temas relevantes: la pobreza (tema fuerte, que a su vez atraviesa otros temas, como la educación y la salud, en las que se trata de buscar alternativas a las insuficientes políticas macroeconómicas); la gobernabilidad (bastante en boga, que incluye subtemas como democracia, derechos humanos y administración pública, en los que se pretende "enseñar" a ser buen gobernante, en el sentido práctico del término); y la violencia (que se entrelaza con los temas anteriores y con el de la subjetividad, viéndosela como resultado de la exclusión).

En opinión de Cáceres, falta establecer procesos comunicativos entre los enfoques diversos surgidos en los últimos años [a los que se adicionaría la perspectiva de género... FR], no con el fin de hacer una teoría única (intención criticada por Ballón), sino para desarrollar un "lenguaje compartido", que parta de reconocer que hay un ámbito que nos vincula y que permite entender, criticar y refutar a los interlocutores en sus propios términos. Se evitarían así muchas imprecisiones[24].

Por último, señaló, al unísono con Ballón, que la perspectiva de la heterogeneidad debe ser estudiada en su sentido profundo, y no superficialmente[25]. "Así evitaremos errores de perspectiva flagrantes, como las de la última encuesta de El Comercio y el PNUD, que concluyó señalando que los peruanos son antidemocrátas, luego de haber hecho una encuesta en la que se preguntaba si se estaba de acuerdo con el régimen democrático. Obviamente, pocos respondieron afirmativamente a algo que no conocían", remató.

Preguntas y precisiones.
En la segunda parte del panel sólo intervinieron los tres primeros ponentes. Walter Twanama señaló que el Estado posee políticas inclusivas y eficientes, pero el problema está en el modo en que éstas se orientan. Así, por ejemplo, se reparten libros gratuitamente a las escuelas, pero no se capacita a los docentes para utilizarlos. El sentimiento de exclusión permanece en los ciudadanos mal formados, lo cual favorece a corrientes que se proclaman defensoras de los marginados, como el nacionalismo. Debe idearse, ante esto, propuestas de integración nacional, que favorezcan una verdadera inclusión[26].

En seguida, Guillermo Rochabrún señaló algunos ejemplos de oportunidades aprovechadas en el Perú[27]. Sería necesario un esfuerzo colectivo por transmitir a la población buenas noticias, y no transmitirle la idea que seríamos una especie de "Suiza fracasada". Además, el problema de la exclusión debería abordarse de modo más creativo. Su discurso debería replantearse, puesto que se tiende a victimizar a los pobres, como si estos no fueran sujetos actores de los cambios. Debería hablarse más de las estrategias de los pobres para escapar de la discriminación, que implica una noción de gente activa, y no solamente "sufriente" o receptora de los abusos de los poderosos.

Por último, Juan Fernando Vega señaló lo que él considera un problema sistémico: todos están satisfechos con la educación tal como está. Y el pensamiento social no busca la racionalidad real que se esconde en esta situación, sólo da respuestas externas. "No se dan cuenta –afirmó- que para los actores educativos la escuela está en función de intereses extraños a la formación[28]”. Así, todos buscan de todo, pero nadie está seguro de los que significa aprobar, repetir, aprender. La pobreza se instaura como justificadora de esta situación: ¿cómo mejorar si somos pobres? "Esta es una coartada, y revela que convivimos en base a la mentira. Pero la mentira tiene consecuencias", concluyó.

x FRANCISCO RAMOS

(Intercambio Filosófico)

Notas.

[1] Vea la publicidad realizada para este evento en nuestro site
Intercambio Filosófico: “Jueves 27: panel Realidad social peruana: otra mirada en la PUCP de Lima”. Noticia del 27 de abril de 2006.

[2] Sociólogo. Docente del Departamento de Ciencias Sociales de la PUCP. Director de la revista Debates en la Especialidad de Sociología de la PUCP. Email:
grochab@pucp.edu.pe

[3] Filósofo graduado en Italia. Sociólogo graduado en la PUCP. Director de Asuntos Académicos de la Facultad de CC. SS. de la PUCP. Email:
jfvega@pucp.edu.pe

[4] Analista social del Ministerio de Educación del Perú, en el que desempeña el cargo de Secretario Adjunto de la Secretaría de Planificación Estratégica. Email:
wtwanama@hotmail.com

[5] Filósofo graduado en la UNMSM. Profesor Asociado del Departamento de Filosofía de la UNMSM de Lima. Email:
jcballonsur@hotmail.com

[6] Filósofo graduado en la PUCP. Docente del Departamento de Derecho de la PUCP. Asesor Regional para América del Sur de OXFAM – Gran Bretaña. Email:
ecaceres@oxfam.org.uk

[7] De esta perspectiva fatalista no se escapan, según Rochabrún, ni sociólogos reconocidos como Julio Cotler. En efecto, cuando éste habla del "lastre colonial" que habríamos heredado, cumple con una función de médico forense, pues habla como de un muerto, al no indicar cómo cancelar dicha herencia negativa. Del mismo modo, otros hablan del racismo, pero no dicen como salir de él. Por su parte, Gonzalo Portocarrero habla del "carácter transgresor del pueblo peruano", anulando toda perspectiva de desarrollo ordenado, como cuando se habla del "carácter antidemocrático" del Perú.

[8] Basadre se plantea, en su “Historia de la República del Perú”, el tema de las "ocasiones perdidas" que tuvimos para convertirnos en República moderna.

[9] Este “principio esperanza” sobre todo opera en su trabajo "Perú, problema y posibilidad".

[10] Empleando el “razonamiento contrafáctico” podemos preguntarnos, por ejemplo, "¿qué hubiese pasado en el Perú, si los encomenderos se hubiesen casado con princesas indígenas e instaurado una dinastía feudal, en lugar de tratar a sus hijos mestizos como bastardos?", o "¿qué hubiese pasado si el ejército de Atahualpa derrotaba a las huestes de Pizarro?".

[11] Rochabrún señaló que el mismo Hugo Neyra (cuyo análisis de la realidad peruana es incluso más amargo que el de Cotler) reconoce que en la actualidad hay por lo menos dos experiencias históricas de países que han dado un "viraje" hacia la modernidad democrática: es el caso de España y de la India. Además, apuntó que hasta hace unos años se pensaba que los países del sureste asiáticos no podían desarrollarse "por su religión y su cultura antagónicas a toda proceso de modernización", pero se ha mostrado (por el desarrollo patente que han experimentado estos países) que no es así.

[12] Como resultado de las políticas inclusivas, la sociedad peruana se ha urbanizado (de 30% a 70% de la población); ha subido la esperanza de vida (de 35 a 70 años); y ha disminuído la tasa de analfabetismo considerablemente (de 40% a 8-12%). La cobertura de educativa se ha ampliado, y ahora la población que accede a la educación secundaria es predominante y el acceso a la educación superior va en aumento sostenido.

[13] En el Perú, mientras el porcentaje de aprobación es de aproximadamente 90%, el de comprensión lectora y matemática desciende dramáticamente: sólo el 10% de los alumnos cuentan con esas aptitudes.

[14] La inercia de los actores educativos en el Perú sólo sería aparente, a decir de Vega: los profesores evalúan a los alumnos y los aprueban, a pesar de que no lo merecen. Los padres de familia nunca reclaman por la ignorancia concreta de sus hijos, pues se conforman con que les traigan la libreta en azul. En este contexto, la administración pública recibe las actas de los estudiantes de educación, y sin más requisitos estos empiezan a hacer sus prácticas y a licenciarse… Todos actúan a sabiendas de los resultados finales [pero señalar las consecuencias negativas no es “políticamente correcto”... FR].

[15] La interpretación de Vega sobre esta realidad es la siguiente: en una sociedad ágrafa, las normas y los contratos no forman parte de las prácticas sociales comunes (en lo que respecta al caso peruano, esto ha sido perfectamente reflejado por "Los ríos profundos" de José María Arguedas), lo cual va alargando la espera para concretar la modernización.

[16] Dicha actitud fue ilustrada mediante una analogía: Twanama hizo referencia a lo que hubo en Davos 2005: en este Congreso mundial, la actriz Sharon Stone inició una convocatoria para comprar, por un millón de dólares, ¡mosquiteros para defender de la malaria a los niños de Tanzania! Por supuesto, el descontrol derivado de ello, hizo que esta iniciativa originada del sentimentalismo sea un fracaso: la malaria no se detuvo, porque los mosquiteros se vendían o no se sabían utilizar. Del mismo modo, el pensamiento crítico ignora que los problemas no tienen una explicación inmediata, por no tener una sola causa.

[17] Se ha llegado a refutar, en efecto, la clásica visión del Perú como "sociedad compartimentalizada", donde se piensa que indios, mestizos y blancos viven cada uno por su lado y poseen códigos propios: en ella, se piensa que la costa, la sierra y la selva (nuestra división geográfica tradicional) albergan formas de vida radicalmente distintas entre sí.

[18] Es decir, mediante el uso de “funciones discriminantes” [la analogía con la perspectiva matemática es clarísima, y esto no lo oculta Twanama... FR], podemos saber si podemos o no “cholear” a una persona (tratarla despectivamente como indio o mestizo).

[19] La “mirada del otro” en la subjetividad peruana es un tema al que ya habrían apuntado las investigaciones del antropólogo Fernando Fuenzalida (con su revisión del concepto de "raza social") y del filósofo recientemente fallecido Juan Abugattás (y sus estudios sobre el carácter bipolar de las "categorías" sociales peruanas: militar-civil; indios serranos-blancos costeños; etc.).

[20] Nuestras sociedades heterogéneas, de acuerdo a Ballón, han decidido convivir a pesar de nuestros mutuos mestizajes, amores, odios... y matanzas (que nunca han sido tantas como en la "culta" Europa). Esto causaría a un occidental tanta perplejidad, que exclamaría lo que ya alucinó Héctor Velarde Bergmann (arquitecto y literato peruano, 1898-1989): "Hamlet se confundiría al llegar al Perú, porque aquí ser y no ser son lo mismo".

[21] La milenaria cultura quechua sería prueba de esta “incoherencia saludable”, ya que es resultado de innumerables alianzas (lingüísticas, simbólicas, políticas, etc.). No hay abstracción que funcione en ella. “Nuestra cultura es tan cualitativa, que no sirve de nada aprender a sumar ni a restar”, comentó Ballón. A pesar de todo, nuestra posibilidad de reconstruir en poco tiempo las relaciones rotas es impresionante. Por ello no estuvo de acuerdo con lo que dijo Juan Fernando Vega, en lo relativo a que nuestra situación cultural sería similar a la de Sudáfrica: en nuestra cultura no hay tanto radicalismo de la división.

[22] Ejemplo de la tendencia economicista en las ciencias sociales peruanas son los planteamientos del marxismo clásico y los del pensamiento crítico de izquierdas; el enfoque político es característico de los gramscianos y de algunos investigadores de la Universidad Católica; mientras la perspectiva de mentalidades se promueve en obras como "Filosofía andina" de Josef Estermann, "Buscando un inca" de Alberto Flores Galindo, y en compilaciones como "Los nuevos limeños", editada por Gonzalo Portocarrero.

[23] El eclecticismo de las investigaciones recientes en el pensamiento social peruano está representado por los trabajos sobre economía informal, elaborados desde la subjetividad de los informales [...viene a la memoria “El otro sendero” de Hernando de Soto... FR].

[24] Las imprecisiones de los investigadores sociales tienen su ejemplo cuando se trata de identificar al "sujeto de la historia" peruana. En los años 70 se hablaba al unísono que eran las clases sociales, y a fines de los años 80-principios de los 90, se hablaba de los "individuos calculantes". Pero ahora se habla de innumerables clases (A, B, C, D... hasta la Z) por fines meramente comerciales, y hay distintas perspectivas económicas. De otro lado, el mismo término "pobre" se ha dejado sin precisión, lo cual debe replantearse con urgencia, para dejar de hacer de él el cajón de sastre que genera tantas políticas catastróficas. En efecto, ya no se habla de "campesinos pobres" ni de "indios pobres", sino simplemente de "pobres": ¡el adjetivo se ha comido a los sustantivos! Cosa que nunca hicieron ni Mariátegui, ni Haya de la Torre, ni ningún historiador peruano ilustre.

[25] En la investigación de nuestra heterogeneidad no basta, por ejemplo, describir como tales las alianzas que se establecen entre distintos grupos de la sociedad, sino que hay que preguntarse "¿por qué se hacen?". Tampoco basta investigar las funciones de la escuela, sino que hay que preguntarse por la realidad educativa, presupuesto básico de aquélla.

[26] “Para lograr una inclusión auténtica, los pedidos de aumento de presupuesto no lo son todo”, indicó Twanama... esta actitud economicista hace caer a la sociedad civil peruana a los niveles de emocionalidad irracional de una Sharon Stone pidiendo mosquiteros para los niños de Tanzania.

[27] Fue una oportunidad aprovechada por los peruanos la firma del acuerdo de paz con Ecuador, y fue positiva a pesar de la concesión de Tiwinza... y de los votos que éstos puedan haberle robado a Lourdes Flores (candidata presidencial que apoyó dicho acuerdo, y que ahora ha quedado relegada de la segunda vuelta electoral peruana). Otra ocasión aprovechada fue el impulso que una "dictadura" como la de Velasco (que gobernó el Perú entre 1968 y 1975, implantando una política de nacionalizaciones y expropiaciones masivas) habría dado a los empresarios nacionales, para que incursionen en nuevos ámbitos de negocios. Sólo así, Dionisio Romero (un conocido empresario peruano) pasó de simple empresario agrícola a industrial.

[28] Vega señaló contundentemente: “¿Qué es la escuela para estos actores educativos? Para los padres de familia, es una guardería, a la que mandan a sus hijos con el cuento de que van a aprender. Para los profesores, es una forma vitalicia de hacer cachuelos con nombramiento (semejante a la de los terratenientes que cobran una renta sobre un territorio, ya sea que lo trabajen o no: en efecto, ¡aprendan o no sus alumnos, igual cobran!). Para el Estado, es un sistema de encuadramiento, en la que instruyen a los alumnos en el sistema de subordinación jerárquica: se les enseña que no hay que delinquir... y que tampoco hay que "ser acusete". Para el gobierno, simplemente es un medio que da réditos a la gobernabilidad: se suben los sueldos de los docentes simplemente para obtener paz social. Y para los alumnos, es un medio para obtener certificados, en un país donde el mejor de los alumnos de una escuela pública es ninguneado frente al peor de los alumnos de una institución con prestigio social". Sobran los comentarios.

miércoles, 26 de abril de 2006

Jue27abr2006, PUCP (Lima): PANEL "REALIDAD SOCIAL PERUANA, OTRA MIRADA"


Agradecemos a David Villena Saldaña (destacado sanmarquino, egresado el año pasado de la Escuela de Filosofía de la UNMSM) la gentileza de comunicarnos la siguiente noticia. La Pontificia Universidad Católica del Perú (Lima) organiza, para este jueves 27 de abril, un panel denominado "Realidad social peruana, otra mirada".

Sobran los comentarios. En tiempos en que resulta urgente la elaboración de una sólida visión alternativa de la realidad nacional, un evento como éste puede ayudar a reelaborar, desde una perspectiva racional, una respuesta a los problemas que nos agobian desde los inicios de la República (los fallidos intentos por iniciar un proceso de modernización, por ejemplo).


PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ
CICLO DE PENSAMIENTO SOCIAL PERUANO Y LATINOAMERICANO

Panel
"Realidad Social Peruana, Otra Mirada"

En el panel "Realidad Social Peruana, Otra Mirada", profesores e investigadores presentarán sus reflexiones e interrogantes sobre el Perú de hoy, como parte del Ciclo Pensamiento Social Peruano y Latinoamericano, organizado por la Especialidad de Sociología y el Centro de Investigaciones Sociológicas, Económicas, Políticas y Antropológicas (CISEPA), de la Facultad de Ciencias Sociales.

Se habla de "Otra mirada", porque corresponde a un ensayo crítico de los términos en los que usualmente nos referimos a la realidad social. En este diálogo, los panelistas y los asistentes analizarán la continuidad o discontinuidad de temas y debates, muchos de los cuales, sin duda, estarán vinculados a aspectos coyunturales, pero sin las urgencias de los discursos de cualquier campaña electoral.

Panelistas
Guillermo Rochabrun, sociólogo PUCP
Juan Fernando Vega, sociólogo PUCP
Walter Twanama , analista social
José Carlos Ballón, filósofo UNMSM

Fecha: jueves 27 de abril de 2006
Lugar: Auditorio J-101 de la Facultad de Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica del Perú (Av. Universitaria Cdra. 18 s/n San Miguel)
Hora: 12:00 p.m.

El ingreso es libre

domingo, 23 de abril de 2006

9-18mayo2006, PUCP (Lima): CICLO DE CONFERENCIAS "PARADIGMAS DE LA ÉTICA"


Un importante ciclo de conferencias, denominado "Paradigmas de la ética", se realizará en la Universidad Católica del Perú durante el mes de mayo.

Creo que el "estilo Católica" con el que se tratarán los temas programados (normalmente ligado a un modo universalista de tematización, con excepciones que confirman la regla), no será obstáculo para quienes deseen actualizarse en la problemática ética contemporánea, de la que nuestros colegas en dicha universidad privada se encuentran bien informados.

Más detalles, extraídos del website del Centro de Estudios Filosóficos de la PUCP (el organizador de las conferencias), al final de este mensaje.

PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ
Ciclo de conferencias:
"Paradigmas de la ética"

Del 9 al 18 de mayo de 2006. Campus PUCP. Ingreso Libre.
Lugar: Auditorio de Humanidades, campus PUCP

Horario: 6:00 p.m.

Entrada: Libre, previa inscripción

Este ciclo de conferencias tiene como fin introducir al público en general al estudio de la ética a través de sus principales paradigmas. Se busca así atender a una demanda importante de la comunidad nacional, principalmente del ámbito académico, con relación al esclarecimiento de la noción de ética y de su enorme relevancia para el mejoramiento de las condiciones de vida de los ciudadanos.

Las conferencias serán dictadas por los profesores de la Especialidad de Filosofía de la Pontificia Universidad Católica del Perú.


Programa:

- Martes 9 de mayo

6:00 p.m. Ética de los bienes . Adriana Añi

7:00 p.m. Pragmatismo y realismo moral. Pablo Quintanilla

- Jueves 11 de mayo

6:00 p.m. Ética del cuidado. Pepi Patrón

7:00 p.m. Ética de la responsabilidad. Rosemary Rizo-Patrón

- Martes 16 de mayo

6:00 p.m. Ética de los sentimientos. Ciro Alegría

7:00 p.m. Ética del reconocimiento. Miguel Giusti

- Jueves 18 de mayo

6:00 p.m. Utilitarismo. Luis Bacigalupo

7:00 p.m. Ética de los principios. Fidel Tubino

sábado, 22 de abril de 2006

ENTREVISTA A FRANCISCO MIRÓ QUESADA: "LA META DE LA HISTORIA ES LA SOCIEDAD SIN CLASES"



"La meta de la historia es la sociedad sin clases"

Entrevista a Francisco Miró Quesada Cantuarias
por M. A. Paz y Miño (Revista Peruana de Filosofía Aplicada)
21 de enero de 1996


El Dr. Francisco Miró Quesada Cantuarias (Lima, 1918) ha sido Presidente de la Federación Internacional de Sociedades de Filosofía (FISF), es profesor emérito de la Universidad de San Marcos, dirige el Instituto de Investigaciones Filosóficas de la Universidad Ricardo Palma y es director fundador del Suplemento Dominical del Diario El Comercio de Lima donde divulgó la filosofía. Es autor de los libros: Humanismo y revolución, La ideología de Acción Popular, Apuntes para una teoría de la razón, Lógica, Para iniciarse en la filosofía, Hombre, sociedad y política, Filósofo y matemático, etc.


Dr. Miró Quesada los matemáticos, los científicos naturales y sociales e incluso los psicoanalistas y teólogos tienen su campo de estudio. ¿Cuál cree Ud. que pueda ser aún el de la filosofía?

Es una pregunta difícil de responder porque como Ud. sabe muy bien no hay un concepto universal de filosofía. Algunos filósofos piensan que la filosofía es algo completamente distinto de la ciencia. En cambio otros piensan que la filosofía no es sino la parte de la ciencia que todavía no ha podido rigorizarse. La filosofía aún no halla un método que pudiera seguir -como dice Kant en una frase maravillosa- el segundo camino de la ciencia. Para mí la filosofía es eso. No hago una diferencia cabal entre filosofía y ciencia. Pero por ejemplo para Heidegger es completamente distinto, para él la filosofía es la meditación sobre el ser, y no tiene nada que ver con la ciencia ni con la tecnología. El rechaza todo eso, cree que la tecnificación de nuestro siglo es un síntoma de decadencia, no es filosofía, está alejada de la médula y el meollo de la filosofía. Claro, cuando uno está en un congreso por ejemplo y se discute un problema, las objeciones de los heideggerianos existencialistas y la de los filósofos científicos hasta donde sea posible no se entienden nunca, es imposible. Ahora la diferencia es ésta: nosotros podemos entender bastante bien lo que dice Heidegger o lo que dice Nietzsche -que para mí no es un filósofo sino una especie de profeta del nihilismo-. Podemos entender eso pero ellos no pueden entender lo que decimos nosotros, de manera que están en desventaja en la discusión. Porque para entender ciertos aspectos de la filosofía científica hay que estudiar muchísimos años: matemáticas, física, lógica. Y algunos quieren ir por la vía más fácil: "no eso no es filosofía, eso no se estudia". Y claro, leyendo a Heidegger o leyendo a Sartre o dos o tres libros ya creen que lo saben todo, que ese es lo objeto de la filosofía.

Y ahora ¿qué relación tiene la filosofía con la práctica? Yo creo que está profundamente ligada a ella. Todos los grandes filósofos del pasado han considerado que la filosofía también debe utilizarse para estudiar el mundo y en lo posible para cambiarlo. Por ejemplo Platón, aunque a algunos filósofos marxistas no les guste esto pero fue el primer filósofo comprometido de la historia. Fue llamado por el tirano de Siracusa para que aplicase sus ideas y transformase el Estado, las redes jurídicas. Platón aceptó, apenas llegó, todos los nobles y los que lo rodeaban al tirano empezaron a calumniarlo, y Ud. sabe que una de las pasiones más visibles del tirano es la importancia que le da a los chismes. Ud. le dice a un tirano: "Esto es así..., habló mal de ti...", lo mata o lo bota pero le cree. Entonces creyó el tirano, aisló a Platón en la acrópolis de Siracusa. Platón salió con muchas dificultades, y esto le pasó hasta tres veces.

Lo mismo Kant, él dice claramente -en la Crítica de la razón práctica- que el principal interés de la razón es práctico y que el interés teórico solamente puede completarse a través de la utilización práctica de la razón.

Creo en la importancia de la praxis sobre la teoría. Creo que un filósofo debe estar con los pies bien plantados sobre la tierra y debe ser un crítico social. Ahora he estado leyendo esto (*) y me ha gustado mucho y dice una serie de cosas de lo más interesantes y estoy de acuerdo en que la filosofía debe ayudar al país, eso además lo he dicho muchas veces. E incluso he traído aquí algunas publicacione para que vea la manera como lo hice.

Como Ud. sabe fui el ideólogo de "Acción Popular", traté de aplicar todo lo que pude. Pero ve ahí Ud., por ejemplo, el talento de Fernando Belaúnde -uno puede estar de acuerdo con él o no- fue el Perú como doctrina. Los otros partidos tenían ideologías importadas, por ejemplo, los democristianos o los apristas. Estos tenían una ideología no propiamente marxista pero si marxistoide, y después cuando cambian Haya de la Torre dice que el fundamento ideológico del Aprismo es la Teoría de la Relatividad de Einstein, interpretándola al revés.

En cambio lo nuestro era del Perú, era inspirarse en la tradición del pueblo, sobre todo en la tradición campesina y se podía trabajar muy lindo. Entonces yo escribí un libro grande de unas 250 páginas sobre la ideología de Acción Popular, donde está más o menos lo que yo pienso. Pero hay una cosa que sí es importante: no sé si Uds. están informados de un movimiento -sobre todo argentino pero que lo hay también en otros países- que se llama filosofía inculturada.

Algo he escuchado.

Bueno, hay un jesuíta, el padre Carlos Scanonne es uno de los principales. Ellos dicen que la filosofía debe inspirarse en el alma popular, debe responder a eso. Si Ud. lee eso se da cuenta que yo he practicado la filosofía inculturada desde hace muchos años y cuando estuve en el partido hice lo posible por modificar la realidad peruana.

Lo último que Ud. dice me lleva a preguntarle lo siguiente: En la actualidad, ¿qué proyectos puede plantearse el filósofo en relación al Perú de hoy?

Yo creo que esto es fundamental porque la filosofía tiene dos aspectos: uno que podría llamarse el sistemático o sea la elaboración de grandes teorías y otro es el aspecto crítico. La filosofía crítica es sumamente importante pero a veces no se ha visto bien porque es así. Lo que han dicho muchos de la filosofía crítica son los de la Escuela de Frankfort, filósofos como Habermas, Adorno y todos ellos pero no han dicho en que reside la verdadera solidez de la filosofía crítica. Reside en esto: que Ud. para hacer un sistema tiene que saber muchas cosas, tiene que ensamblarlas, tiene que especular, pero para criticarlo basta descubrir una cosa falsa en el sistema para que el sistema o se reajuste o se derrumbe, eso se hace con la lógica, eso se llama contraejemplo.

Ud. ve una gran doctrina social que trata de justificar el capitalismo, por ejemplo. Según el capitalismo esto debería ser así pero no es así en consecuencia eso es falso. Basta un solo ejemplo, a veces, basado en la lógica que es una disciplina científica para que se venga abajo una doctrina. Esa es la importancia de la filosofía crítica y yo creo que ahora se está haciendo así.

En estos momentos el Perú está en una situación muy difícil porque de un lado están las reformas económicas que después de una inflación galopante era absolutamente imposible no hacerlas, había que hacer una serie de cosas: privatizar empresas, tratar de estabilizar la moneda, sobre todo parar la inflación porque cuando una inflación es galopante como la del gobierno anterior [de Alan García] el país ya no aguanta.

Pero como sucede siempre, el derrumbe de la Unión Soviética y de los países totalitarios ha hecho que haya un neoliberalismo que es tan fundamentalista como los musulmanes o los marxistas rusos: ¡totalmente fundamentalistas! Entonces hay que privatizar todo, si el pueblo se muere de hambre "¡qué le vamos a hacer!, ¡pobrecito! Pero era la única manera".

Y yo creo que uno de los papeles de la filosofía es luchar contra eso, pero luchar de una forma racional bien fundamentada. Porque uno no puede decir: "No, eso es totalmente falso, eso es imperialismo, hay que regresar al otro..." ¿A qué otro? ¿Ud. quiere regresar a la inflación o quiere regresar al stalinismo? Por ejemplo, en Rusia ahora debido a la situación que se produjo ha resurgido el comunismo y hay partidos que se llaman a sí mismos comunistas lo mismo en otros países de la antigua esfera soviética, pero todos ellos ponen en su programa libertad de prensa, libertad de pensamiento, libertad de asociación. Si Ud. les discute: "¿Uds. quieren regresar al stalinismo?", "¡Ud. está loco!" Ya eso no se puede, lo que hay que hacer entonces es una crítica bien hecha porque creo que dentro de la inevitable recuperación económica es necesario, sí, privatizar pero lo grave es que la juventud está creciendo con eso en la cabeza: "Lo único que importa es ganar dinero, lo demás no importa nada". El dinero es importante mientras más se gane mejor, si es honradamente.

Pero hay cosas mucho más que el dinero, el dinero es un medio, lo que interesa es la vida, es el proyecto humano de cada cual y en último término si Ud. aplica la filosofía crítica tal como yo le digo y algunos aspectos que serían demasiado largos decirlos en estos momentos, si Ud. de verdad pone al hombre como centro de la economía, como centro de la historia, la meta de la historia es la sociedad sin clases. Yo derivo eso en una forma muy distinta del marxismo pero en una forma más directa y sin las contradicciones del marxismo porque para él la esencia es la lucha de clases pero ya después se llega y ya no hay lucha de clases y entonces están yendo contra su propio principio.

Es indiscutible que la meta es la sociedad sin clases. Cuando yo digo eso la gente se asusta: "¡Ah, Miró Quesada es comunista!" Yo lo decía en mis clases de Filosofía del derecho en la Universidad de Lima. No, eso no es ser comunista, eso no es ser nada. Lo grave es esto, lo grave es la objección que hace Popper a la filosofía política, dice "cuando un gobernante, que es asesorado por un filósofo político o por un grupo de filósofos, está convencido que la realidad debe de modificarse según tal modelo, eso es muy peligroso porque por más que abarque la razón no puede abarcarlo todo. Entonces van a salir cosas en el camino que no estaban previstas y se van a tratar de meter en el zapato como sea". Es lo que es que pasó con la Unión Soviética: explotó no porque fuera socialista sino porque cometió demasiados errores económicos. Tenía inmensos recursos, y entonces controlaba a todos, hacía cosas absurdas. Por ejemplo, un televisor costaba baratísimo, un par de zapatos costaba carísimo. ¿Por qué? Porque al gobierno le interesaba que el pueblo tuviese televisor para escuchar su propaganda, eso los trajo abajo, pero mientras haya clases habrá injusticia en el mundo. Es cierto, que paradójicamente el marxismo ha contribuido a humanizar al capitalismo, o a que sea menos inhumano, porque las leyes sociales que se han dado han sido por presión de los sindicatos que por lo general eran manejados por comunistas.

Paradójicamente el marxismo ha contribuido a hacer el capitalismo menos inhumano pero no puede ser totalmente humano, porque mientras haya clases hay alguien que está encima de nosotros. Hay alguien que puede exigir a los otros lo que los otros no pueden exigir de él, lo demuestra la relación de poderes asimétrica, en cambio para que haya de verdad una sociedad humanizada las relaciones de poder tienen que ser simétricas, o sea yo puedo ser presidente, tu puedes ser presidente, tu me puedes exigir lo mismo que yo. Y eso no puede hacerse mientras no haya una sociedad de abundancia, son problemas muy difíciles y prácticos.

Ahora una cosa una cosa es no tener modelo -porque son peligrosos- y otra cosa es no tener meta, la crítica de Popper de no tener modelo se aplica a todo, entonces ya no hay metas. Entonces los que manejan el poder y el dinero pueden hacer lo que se les dé la gana y eso no puede ser de ninguna manera. ¿Y la meta cuál es? No hay sino una: La sociedad sin clases, no hay otra. Pero ¿qué cosa hay que hacer para llegar a la sociedad sin clases?

En primer lugar hay un aspecto negativo: ya sabemos qué cosa es lo que no hay que hacer para llegar a la sociedad sin clases porque en Rusia y los países comunistas se formaron nuevas clases. Nuevas clases que en sentido ético tal vez eran peores que las clases de los países capitalistas porque "los capitalistas", como dice muy bien Marx en varios textos, "lo que quieren es ganar dinero", en cambio los dirigentes de la nueva clase en los países comunistas dicen: "No, estamos haciendo esto para llegar a la sociedad sin clases pero hay que esperar por esto y por esto". Y esperaron y esperaron y esperaron, o sea se basaban en conceptos morales lo que es grave. En cambio los capitalistas son cínicos: "A mí no me interesa la ética, quiero ganar dinero".

Y claro los comunistas se olvidaron de la meta. Ahora ¿cómo llegar a la meta? No se pueden hacer predicciones, es muy difícil, pero si se puede llegar con lo que se podría llamar un pragmatismo coherente, porque el político que dice "Yo soy pragmático", está diciendo "Yo para llegar a mis fines hago lo que me dá la gana". Eso no se puede aceptar de ninguna manera, Ud. no puede suprimir la libertad para crear una sociedad libre. Ud. no puede suprimir el pensamiento, o no puede suprimir la literatura, para llegar a una sociedad en la cual se pueda pensar libremente y leer libremente, no se puede.

Entonces el pragmatismo a secas es muy peligroso, pero un pragmatismo coherente con la meta yo creo que es la única salida. ¿Por qué? Porque hay algunos aspectos que tal como está la sociedad no se pueden cambiar por una serie de razones. Pero si la ciencia y la técnica siguen progresando puede llegar un momento que sí se puedan cambiar. Por ejemplo, la irrigación de la costa peruana que es casi un desierto. La irrigación mediante la desalinización del agua del mar ya se está aplicando, lo aplican en algunos países como Israel y en algunos pueblos de California, todavía no es totalmente comercial, pero ellos la necesitan y pueden gastar más de los ingresos que les produce tomando de otros ingresos lo que no es muy grande. Nosotros no podemos hacer eso, pero el día en que ya sea comercial la desalinización del agua de mar, nuestra costa se transforma en un vergel. Entonces se acabaron los problemas de carestía de alimentos y esas cosas.

Luego el plan para llegar a la meta es ir utilizando los avances de la técnica, los avances de la ciencia, como también es creando conciencia social de la necesidad de ir hacia esa meta. Y no sé si algún día se llegué a una sociedad realmente sin clases pero yo creo que nos podemos aproximar a ella más y más, así como una variable se aproxima a otra. Pero aún estamos aquí, nos falta todavía tanto, ahora falta menos y menos, eso le da sentido a la historia... Ahora el gran sistema, hay que dominar toda esa masa analítica que es gigantesca. Por eso algunos dicen "no", algunos pesismistas de la filosofía, "el siglo xx no ha producido ningún Kant, ningún Leibniz, ningún Spinoza, en la primer mitad del siglo bueno, hubo uno como Husserl pero más o menos, como Bertrand Russell, pero ya no hay grandes filósofos".

La respuesta es muy simple: no los hay porque mientras no se haga una labor de síntesis no puede haberlo. Pero yo estoy seguro que sí los habrá porque ahora esta conciencia de la necesidad de síntesis se ha extendido por todo el mundo filosofico, hay por ejemplo, en Australia un filósofo, hay varios, pero el principal es Bradley que es un genio que está tratando de hacer también el sistema. Entonces ya se está empezando, los filósofos que van a venir en el futuro -no sé si serán más grandes o no que Kant o que Leibnitz, es infantil comparar- van a hacer cosas nuevas. Creo que es inevitable, es un poco como el Ying y el Yang chino, períodos de análisis, períodos de síntesis, bueno eso es lo que le podría decir, esa es la manera como yo veo la filosofía.

Y además en el Perú tenemos que hacer crítica social y decir de frente la crítica social sin clases, se asuste o no se asuste. Y claro para llegar a eso en el Perú es más difícil, en el Tercer Mundo es más difícil que en el mundo industrializado. En parte sí porque aquél no tiene los recursos que éste tienen en abundancia. Pero en parte tal vez no más, no tenemos el enorme peso de la sociedad industrial porque la sociedad industrial es una sociedad de explotación. Eso es muy importante, han subido los niveles de vida, hay que reconocerlo, pero no pueden superar la explotación, tienen mucha. En cambio, nosotros que no tenemos industria podemos hacer una serie de cambios fácilmente.

Yo creo que ahora en Europa los filósofos se están preocupando mucho por los sistemas éticos. Por ejemplo Agazzi, que fue el anterior Presidente de la FISF (El primero elegido he sido yo porque antes no se elegía a los presidentes. El presidente era automáticamente el que presidía la comisión organizadora del país. Había complicaciones porque al presidente lo habían puesto ahí por cortesía, porque era viejo, luego era una calamidad). Entonces la FISF en estos momentos está destinándose a fondo para la discusión filosofica y el análisis filosofico de la moral. Más aún las Naciones Unidas está muy preocupadas, y lo están por esta razón: En 1948 me parece y luego en el 52 se proclama la Declaración Universal de los Derechos del Hombre es una maravilla. No si Ud. la ha leído, la ha tenido en sus manos, vale la pena ver, es perfecta: Libertad de información, los niños deben estar protegidos, hay derecho de asilo, todo el mundo debe tener de un salario digno que le permita vivir dignamente... Pero al mes de haber publicado, de haber proclamado esta Carta -desde el punto de vista histórico es formidable más que la Carta Magna, más todavía porque es del mundo entero- se hacía todo lo contrario. Han pasado pues 50 años haciendo todo lo contrario de lo que ellos mismos habían proclamado, es un fracaso. En el mes de marzo del año pasado hubo una reunión cumbre en Copenague donde asistieron 120 Jefes de Estado, fueron presidentes, reyes, premieres, Fujimori fue. Y paralelamente a esa reunión cumbre hicieron un congreso de filosofía política en Copenague financiado también por las Naciones Unidas y en parte por el gobierno danés. Y ahí invitaron a varios -yo estuve entre los invitados-, y se plantearon programas muy lindos ¿cómo hay que hacer para que la ética pueda de verdad ser vivida, para que los nacionalismos no sean agresivos?... Se dijeron cosas muy lindas y después en París se hizo otro -yo llegué también al finaal-, era interesantísimo. El título era "¿Qué cosa es lo que no sabemos?" y lo que no sabíamos era ¿cómo conciliar los ideales de los Derechos Humanos con la actividad bélica internacional? Porque mientras las naciones poderosas no cambien va a ser imposible. Pero ya hay conciencia de que estamos en eso. Entonces, claro, la impresión que se tiene cuando se lleva un curso de filosofía, lógica o filosofía griega es que nadie se ocupa de eso. Pero sí se están ocupando, regresando a Agazzi acaba de publicar un libro estupendo que se llama La Ciencia, la técnica y la moral. La esencia es la siguiente: la ciencia ha llevado a construcciones tecnológicas pavorosas como la bomba atómica, la bomba de hidrógeno, da la impresión que se puede terminar con la humanidad, poner en peligro la especie humana. Ahora ¿qué se puede hacer ante eso? Se puede controlar a los científicos, se puede suprimir la libertad de investigación. Eso da muy malos resultados. En primer lugar la libertad de investigación es fundamental para un científico como para un filósofo. En la Unión Soviética y China comunista dieron pésimo resultado, porque, por ejemplo, la Teoría de la Relatividad de Einstein se consideraba una teoría burguesa no se le daba importancia, salía un breve parrafito sobre esto: "físico burgués". Pero cuando explotó la bomba atómica a los dos años en el Diccionario de la Academia de Ciencias Soviética, Einstein tenía un montón de páginas. No estudiaron, no se dieron cuenta de las posibilidades, entonces pues eso quiere decir que suprimir la libertad de investigación es muy grave, muy grave. No se puede suprimir, pero al no suprimirla puede haber consecuencias tecnológicas tan o más graves. Entonces los que tienen que asumir la responsabilidad, son los propios científicos y toda la organización social debe tender a que la ciencia esté siempre en favor del hombre y que las condiciones tecnológicas malas, negativas no se lleven a la práctica. Eso es difícil pero no es imposible y además es discutible porque si Ud. prohibe la investigación libre cae en el totalitarismo. Es un poco el filo de la navaja: Si hay libertad la humanidad puede destruirse, si no hay libertad se transforma en un hormiguero.

¿Sólo la razón podrá salvar a la humanidad de sus problemas?

Por supuesto que sí, estoy completamente convencido. La razón no es lo que la gente normal cree, ni siquiera algunos científicos. Muchos creen que la razón es lo automático, que lo racional son las operaciones aritméticas, las máquinas, las computadoras, eso es racional. Eso no es sino un aspecto de lo racional. Cuando Ud. complica un poco las cosas ya todo cambia, por ejemplo en una computadora así Ud. puede resolver problemas de la lógica de las proposiciones ¿Ud. tiene formación en lógica?

Poca [llevé algunos cursos en la Universidad].

Digamos en una computadora como esta, que es muy poderosa, Ud. puede hacer operaciones lógicas elementales. Pero si las operaciones lógicas se complican no puede ¿quiénes pueden, sí es que pueden? Los seres humanos hay que tener talento creativo para resolver el problema racional. De manera que la racionalidad tiene un campo creativo fundamental. No es lo mecánico, y desde un punto de vista racional se puede derivar una ética muy linda. Es lo que estoy tratando de hacer yo.

¿Dónde se encuentra más cómodo su humanismo racionalista con uno de tipo secular que con uno religioso?

La relación entre filosofía racionalista y religión es complicada. Creo que ha sido falseada por circunstancias históricas contingentes. La Iglesia -como lo sabe todo el mundo, además lo he escrito y lo dije en un congreso de filósofos católicos- traiciona su misión, la misión de la Iglesia es el amor. La Iglesia no puede estar con los poderosos, la Iglesia se pone al lado de los poderosos y apoya a los emperadores y a los reyes. Entonces cuando Italia quiere independizarse el Vaticano estaba con Austria, estaba con los opresores y se fueron una serie de grupos, muchos masones, por ejemplo, muchos no masones que se denominaban racionalistas liberales y la Iglesia los condena y por eso parece que hay una pugna insobrepasable entre la doctrina de la Iglesia y la ética racionalista, el racionalismo, y no es así son complementarios, ahora ya pasó eso, ya se liberó Italia.

La Iglesia me parece a mí que está regresando por lo menos en parte, por sus fueros. Ahora hay una serie de sacerdotes de ideas muy avanzadas, tenemos la teología de la liberación de Gutierrez, tenemos también la obra de Illich, que es sacerdote pero con permiso papal, para que guarde un poco de obediencia. Tenemos varios que realmente muestran que la Iglesia está regresando a sus fueros. Y la raíz común entre religión y filosofía racionalista es la misma. ¿Cuál es esa raíz? Es la rebeldía ante el destino, el hombre se rebela ante el destino que tiene, que es que en su vida le puede pasar muchas cosas malas, puede sufrir mucho y después se muere. Entonces el hombre se rebela contra la muerte.

La religión es una solución negativa, dice: "Mi reino no es de este mundo", entonces al librarse de la muerte se cree en el espíritu. Pero es una rebeldía más ante la muerte. El racionalismo también es una rebeldía ante la muerte. ¿Y cuál es la meta del racionalismo? Igualito que la Iglesia: la vida eterna. Claro los que creen a pie juntillas en la Biblia se ríen, "¡Qué pretensión!, ¡Cómo se le ocurre!".

Sin embargo, el estudio del código genético muestra que se puede hacer mucho: ya se están cambiando las características específicas de las bacterias, de las entidades monocelulares. Y ahora se está estudiando a fondo, con computadoras -ahora se usa mucho la computadora- pero sí miles de estudios sobre la mejor manera de manejar el código genético del ser humano. Esto, claro, es siempre el filo de la navaja Ud. con eso puede esclavizarlo, Ud. puede agarrar óvulos, agarrar espermatozoides solos, mezclarlos como quiera, maneja el código genético y salen zombies, salen robotes.

Pero si seguimos viviendo en un mundo libre, como todos esperan que se haga así, va a ser maravilloso porque se van una serie de enfermedades y se va a seguir más y más, ¿hasta cuándo? No lo sé, no podemos estar seguros. Pero queremos lo mismo. La Iglesia dice "Mi reino no es de este mundo", los filósofos racionalistas dicen "Nuestro reino es de este mundo".

¿Qué debe hacer entonces el filósofo ante las afirmaciones de lo sobrenatural o paranormal, criticarlas o ...?

No, estar abierto. El racionalista debe estar abierto a todo. Siempre y cuando se pueda justificar de una manera racional. Ahora, ¿cuál es la manera de justificar

los fenómenos parapsicológicos? Hacer experimentos y luego llegar a conclusiones. Que hay transmisión de pensamiento, se ha hecho un muchos de experimentos. Es indiscutible que la hay, los fenómenos paranormales existen. Ahora la telequinesis también existe, o sea mover objetos a distancia. Incluso hay casos muy conocidos, el de una niña que vivía en un lugar en Alemania y en la casa vecina creían que era una casa encantada con pena porque uno entraba y ¡pam!, las ventanas saltaban, los vasos se caían. Y era que esta niña tenía un poder así inconcebible de telequinesis. Después la precognición que es predecir el futuro ya es un aparte. Y también poder ver a través de las cosas: la clarividencia, también es válida, porque, yo no sé si todavía existe -de eso ya hace muchos años- la Asociación de Prestidigitadores de Francia. Los prestidigitadores detestan a los parapsicólogos dicen que es puro truco.

Habían encerrado en una cofre fuerte un número y ofrecían 500,000 dólares al que fuera capaz de adivinarlo. Por supuesto nadie pudo, nadie fue capaz de adivinarlo. Entonces ni siquiera fueron porque sabían que no podían: "Bueno es que ya cuando es una cosa comercial ya no, porque eso tiene que tener un fundamento ético", "Entonces ya no va a haber más premio, adivinen". Entonces la clarividencia está muy en duda. Yo creo que esa es la manera que tiene el filósofo racionalista de enfrentarse, tiene que estar abierto a todo. Y si hay evidencias, recogerlas y tratar de verlas, ¿por qué?, ¿cómo y hasta dónde nos llevan?

Uno de los defectos, por ejemplo, de mi gran amigo, a quien admiro tanto, Mario Bunge, es que odia a muerte la parapsicología: "Es una farsa". Yo al revés, yo he tratado de ver. He tenido algunos incidentes, una vez tuve un incidente...bueno no grave, pero sí grave desde el punto de vista del comportamiento social porque dijeron que había un medium que trabajaba muy en serio, ha movido mesas y una serie de cosas, era un medium extraordinario, que venía de un espíritu que había tenido creo 300 reencarnaciones porque el número de reencarnaciones creo que valen, no sé como...y uno tenía que ir a verlo, era también incluso adivino. Y bueno hace una serie de sonidos muy raros, ¿Ud. ha visto alguna vez a un medium?

Sí, sí [en películas y la TV].

Es impresionante, le cambia la voz de una forma que uno se queda alelado. Entonces vino no sé qué hindú que había tenido muchas reencarnaciones y dijo, haciendo una de sus presentaciones: "Yo estoy aquí para ayudarlos, díganme cuales son sus problemas yo los puedo resolver". "Sí hay un problema que me tiene loco, desesperado" -le dije-, "que me tiene loco, que no puedo, es el problema de Farmac. Yo quisiera que Ud. me diera la solución. Si la solución es positiva o negativa. Entonces se puso furioso "¡Yo no puedo permitir que un soberbio, un orgulloso venga aquí a hablar de estos problemas!", "¿Cómo voy a ser orgulloso?" -respondí- "Soy humildísimmo, reconozco que yo no puedo y como Ud. dice que puede resolver nuestros problemas quisiera que me diese la solución..."

Entonces la gente dijo: "¡Fuera, fuera, así no se puede!" Me levanté rápidamente y salí del cuarto.

Pero yo no creo que los mediums tengan realmente contacto con los espíritus. A veces hay cosas muy raras, reconozco que hay cosas muy raras pero por la pregunta que hice... porque la pregunta es eso, porque si de otro mundo, del más allá, allá se sabe todo.

¿Acepta la posibilidad de milagros o que Dios responda a las oraciones?

Si fuera creyente sí, pero yo no creo en los milagros. Yo estaba en duda, todos los milagros que he visto era de paralíticos que no podían andar y luego se levantaban, hombres que no podían mover el brazo lo movían, pero por ejemplo si a Ud. le cortan el dedo meñique no le crece ni una arteria. El día que yo vea crecer esto, entonces ese día creeré en milagros. Ahora claro, el gran milagro es Cristo... Yo no sé si exista Cristo o no. Si no fue Dios vendría a serlo, como dice un filósofo francés, el cristianismo en sí es una maravilla. Pero a mí se me hace difícil conciliar la bondad de Dios y la providencia con el mal del mundo.

Todo el mundo sabe sobre eso que se llama Tres momentos y un destino sobre el ateísmo. Una vez vino un sacerdote muy versado, que le gustó tanto que pidió permiso para publicarlo en una revista de teología.

¿Cree Ud. que haya la posibilidad de una forma de conciencia humana después de esta vida?

Eso yo no lo sé, me parece que es muy difícil saberlo. Lo que si no creo es en el alma como que abre Ud. un pomo y ¡zas! se escapa, que es la creencia tradicional, lo que creo es que la materia somos una misma cosa como ya lo dijo Einstein y cuando la materia se organiza en determinada forma surge la razón. No es que la conciencia sea materia, yo soy materialista, soy materio-energicista.

Ahora Ud. dirá "Bueno ¿por qué cuando la materia se organiza así hay conciencia?, ¿quién hizo eso?" Vaya uno a saber, si hay Dios fue Dios, pero si hay un Dios no es como la gente cree. Por ejemplo ¿Ud. ha oido hablar de la Teoría del Big Bang, ...

Sí, sí.

... de la explosión que sale de un punto matemático? Parece pues que es verdadero, cada vez nos acercamos más y más, y ciertas predicciones que han hecho los científicos que han estudiado el Big Bang se han cumplido. Por ejemplo, que hay una radiación de transfondo en todo el Universo, eso se ha descubierto. Pero un Dios que para crear el Universo hace una explosión tan feroz no puede ser muy bondadoso, oiga, es un Dios feroz, terrible.

Claro Ud. puede decirme "Ud. está hablando con su criterio humano, Ud. es un ignorante, no sabe mucho". Sí soy ignorante, no sé mucho pero me parece difícil que un Dios que para crear todo esto que hace una explosión feroz, tremenda se ocupe de nosotros, no lo creo.

¿Cómo se considera Ud. agnóstico, deísta o panteísta?

El panteismo lo rechazo, no le interesa a nadie. El panteísmo no me interesa, porque Ud. como individuo desaparece, Einstein era panteista porque estaba muy impresionado por la regularidad en el Universo pero Einstein era determinista en la naturaleza. La física moderna es indeterminista. Con el panteismo Ud. no saca nada. Ahora desde el punto de vista teórico soy agnóstico y desde el punto de vista ético soy ateo porque no logro conciliar el teísmo con el mal del mundo. Es un poco diferente que la corriente. Yo creo que no se puede probar que Dios existe ni que no exista. Ni los teólogos modernos, los grandes teólogos como Boschenski se ríen de eso, ya nadie habla de eso...es una cuestión de fe. Desde el punto de vista ético sí: no creo en Dios. Ahora alguien me dirá: "Eso es un acto de soberbia, tu deberías ser humilde y aceptar lo que dice la Biblia".

Al que me dice eso le digo "Tu eres más soberbio que yo porque tu pretendes que tu tienes la razón y que yo estoy equivocado. Entonces, ¿quién es más soberbio? ¿Por qué la Biblia va a tener que valer más contra un pensamiento humilde, pequeño? ¿Pero por qué? ¿Por qué tu lo has decidido? Somos igualmente soberbios". No es soberbia, es sensibilidad.

Hay personas que son poco sensibles, tienen suerte. Yo soy demasiado sensible, veo así un dolor me siento mal, me siento enfermo, siento que no tengo derecho a tener la vida privilegiada que he tenido y que sigo teniendo, me ha ido muy bien, no me quejo, todo el mundo me ha reconocido. Pero claro, el problema de Dios es pues inmenso ¿no? Ahora yo les digo eso, que les hable con esa franqueza no, se ha estudiado a fondo. Pero esto no lo diría yo en un salón de damas católicas. ¿Para qué voy a ofender por gusto?: "¿Ud. es ateo?' preguntan, "No soy practicante" contesto.

Ahora como los sacerdotes y los filósofos cristianos saben que soy de buena fe me tratan muy bien, me invitan a congresos. Hubo uno en Lima, un Congreso Mundial de filósofos católicos. Yo por supuesto presenté otras cosas.

¿Cuál cree Ud. que haya sido su aporte a la filosofía en el Perú?

Bueno tendría que hablar de mi mismo y eso es de mal gusto. Eso pregúnteselo a quienes saben mucho de mi obra, por ejemplo a David Sobrevilla y Domingo García Belaunde o aun filósofo latinoamericano como Mario Bunge, Villoro...

¿Cree Ud. que todavía siga vigente el debate entre los temas regionales latinoamericanos versus los temas clásicos y universales?

Más o menos. Ha mermado un poco pero nunca se quisieron. Ahora yo siempre pensé que los dos tenían razón porque un filósofo que no se interesa por los problemas de su realidad está pues investigando sobre la inmortalidad del mosquito, no cabe duda, está en una torre de marfil.

Pero por otro lado los filósofos de la filosofía latinoamericana, Leopoldo Zea, que es el más importante de los filósofos políticos de América Latina, decía "que los analíticos -los llamaba así- eran un problema". Pero los analíticos le respondían muy fuerte: "ninguno de Uds. puede ver lo que yo puedo". Y él contestaba: "Es muy fácil, Uds. están encerrados en una torre de marfil", "pero yo no sé nada, hacer un poquito de historia, hablar del imperialismo y eso, ¡no fastidien!".

Entonces yo creo que los dos tenían razón y cuando estaba con los filósofos políticos, como Zea por ejemplo, en grupo he peleado con ajos y cebollas defendiendo a los filósofos analíticos, y cuando estaba con los filósofos analíticos he peleado con ajos y cebollas defendiendo a los políticos y he tenido la suerte de estar en los dos grupos. Y entonces estoy bien enterado de la filosofía latinoamericana, eso es lo que he hecho más o menos todos los éltimos 50 años.

Y de ahí tengo dos libros sobre filosofía latinoamericana que ya están agotados, quieren que publique otro, cuando ya no tengo tiempo salvo ahora para unas cosas que estoy investigando.

Yo lo que estoy investigando es ¿cómo funciona la razón humana? Eso es lo que me tiene a mí preocupado desde hace más de 30 años. Y ¿por qué? Porque en toda filosofía importante hay siempre una teoría de la razón explícita o implícita. ¿Por qué? ¿Por qué hace Ud. una filosofía si no la puede justificar racionalmente? Por algunos aspectos de la razón hay que acudir a las metáforas de la literatura.

Pero regresando a lo que pueda ser la razón yo creo que tiene que hacer frente a un problema fundamental que es el siguiente: las teorías de la razón del pasado y del presente han sido totalmente desbordadas por el progreso de la ciencia. Por ejemplo, ¿qué tipos de teorías de la razón ha habido? Añejas: el racionalismo clásico, por ejemplo, Leibniz, Spinoza, Kant. Después había el empirismo, Hume, los racionalistas empiristas, los enciclopedistas. Después del empirismo había el pragmatismo creado por Charles Pierce y William James, y hay un montón de pragmatistas, por ejemplo, Richard Rorty, que es muy interesante.

Después otro es el historicismo. Cuando Ud. que trata de comprender, dentro de esa posición qué es lo que ha pasado en lógica, matemática y física está totalmente rebasado, o sea que ni siquiera utilizando la dialéctica hegeliana -que es muy importante-. Pero ninguna teoría tradicional de la razón filosofica puede explicar porque se ha descubierto, por ejemplo, que hay más de una lógica. Eso los racionalistas clásicos no pueden explicarlo. ¿Por qué, por ejemplo, la lógica, el silogismo de Aristóteles vale hasta ahora? Eso los historicistas no pueden explicarlo y después porque hay una serie de aspectos de la matemática moderna, sobre todo teoría de la matemática del infinito, teoría de conjuntos de Cantor, teoría de las categorías que no sirven para nada, no se aplican, nunca han tenido aplicación. Entonces si los pragmatistas tuvieran razón eso no debería de cultivarse, no debería seguirse, no tiene nada que ver.

Entonces pues la razón es algo muy distinto y es bastante difícil descubrirlo porque para descubrirlo hay que meterse en el vientre del bosque o sea lógica, matemática. Y también por supuesto en derecho, historia, ciencias sociales. Hace pues 40 años de eso y he avanzado algo, aunque me falta mucho todavía.

(*) Se refiere al libro de J. O. Obando (ed.) y otros: El quehacer filosófico en el Perú. Lima: Edics. Espigón/RPFA, 1996.



viernes, 21 de abril de 2006

Viernes Filosófico del 21 de abril de 2006: "Filosofía, Liberalismo y Socialismo"


JOSÉ CARLOS BALLÓN: "EN EL PERÚ, ALGUNAS OPCIONES LLAMADAS LIBERALES Y SOCIALISTAS DEFIENDEN PROYECTOS OLIGÁRQUICOS Y ESTATISTAS"


[Lima, 26 de abril de 2006] Gran expectativa generó, el pasado 21 de abril, el primer "Viernes Filosófico" del año 2006 (1) en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Y el tema no lo desmerecía: bajo el
título general de "Filosofía, Socialismo y Liberalismo", el profesor José Carlos Ballón (2) desarrolló muchas tesis conocidas por quienes hemos pasado por sus cátedras del Seminario de Marx y el Seminario de Wittgenstein... pero agregó muchas más cosas, trascendiendo el discurso teórico e intentando aplicarlo a la realidad nacional.

Es más, para aumentar el interés, el mismo profesor confesó que el título original de su conferencia era "Socialismo, Liberalismo y Nacionalismo", aludiendo directamente a nuestra coyuntura, en la que un partido político (Partido Nacionalista Uniendo al Perú) intenta alzarse con el poder en elecciones democráticas.

Liberalismo y socialismo, hermanos de una misma madre: la modernidad.

Comenzó recordando el origen común del liberalismo y el socialismo: el proyecto moderno ilustrado (y sus ideales de libertad, igualdad y fraternidad). En efecto, estas doctrinas políticas constituyen dos fieles expresiones de la civilización moderna, que tienen la ventaja de verse apoyados por sendos movimientos sociales: empresarios y obreros organizados han fortalecido, en la práctica, la influencia de ambas doctrinas.

Las condiciones que genera la civilización moderna son, por un lado, una profunda escisión entre sociedad civil y Estado, promoviendo el fortalecimiento de aquélla y la progresiva extinción de éste. Por otro lado, la tendencia a la expansión y la universalización de la cultura moderna es innegable, propiciando la desintegración de todo tipo de poder local.

La modernidad, de acuerdo a lo expresado por Ballón, constituye un "proceso de sacralización" del individuo autosuficiente, que vive de su trabajo y no de prebendas, lo que marca un profundo contraste con

las formas premodernas de organización social, con sujetos dependientes de los círculos del poder, y congregadas en clanes unidos por relaciones de parentesco (3).

Coincidencias programáticas entre liberalismo y socialismo. Diferencias de grado

Ambas doctrinas coinciden en la necesidad de fortalecer a la sociedad civil, en detrimento del poder coercitivo del Estado. Subyace la concepción de que nadie debe tener más poder sobre los demás: todo funcionario público es vigilado al detalle, mediante una acción organizada (de ahí la conformación de los sindicatos de empresarios y obreros).

La diferencia, según Ballón, sería de grado. El conflicto entre liberalismo y socialismo surge al discutir el reparto de la riqueza entre obreros y empresarios, y por la mayor radicalidad del socialismo: en él, se propone la plena socialización de los medios de producción, en un contexto de conducción racionalizada y planificada (4).

Con todo, esto no anula las semejanzas profundas que, metafóricamente hablando, hacen del liberalismo y el socialismo clásicos dos "primos hermanos" en pugna por la primacía.



La cultura moderna ha sacralizado la imagen del individuo emprendedor
(María Burgaz: Individuos I)

Los "otros" liberalismos y socialismos. El caso del nacionalismo en el Perú.
Culminada la fase descriptiva, Ballón esbozó una serie de apreciaciones sobre la recepción de los discursos liberal y socialista en nuestro país. Afirmó que entre nosotros se da el caso paradójico de que los que se han apoderado de estos discursos no corresponden a los mismos, por sus actitudes llenas de un extraño énfasis en la necesidad de fortalecer las estructuras del Estado.

El mismo nacionalismo en boga sería una expresión de esta distorsión, que haría saltar de sus tumbas a Adam Smith y Carlos Marx. En efecto, sus afectados llamados al patriotismo serían justamente lo que siempre denunciaron los máximos representantes de estas doctrinas políticas: hacer que los individuos se subordinen a objetivos abstractos, de índole supraindividual, que no tienen nada que ver con el fortalecimiento de la
sociedad civil.

De esta manera, vemos que en el Perú algunas opciones llamadas liberales y socialistas defienden [conciente o inconscientemente, conforme a la expresión de los marxistas] proyectos oligárquicos y estatistas. Y en estos días vemos cómo se dejan absorver por un nacionalismo corporativo-estatista. Esto reflejaría lo que Alberto Flores Galindo llama "la tradición autoritaria" de nuestro país (5).

Esperanza de modernización en los trabajadores y empresarios independientes peruanos.
Ballón aseveró que, pese a este panorama, hay una creciente franja social (aproximadamente un tercio de la población) que produce empresarios capitalistas y trabajadores independientes, ambos generadores de riqueza. No se ha medido aun su extensión, ni analizado si esto significa el inicio de una modernización mayoritariamente esperada.

Añadió (a manera de ejemplo) que, siguiendo al antropólogo Teófilo Altamirano (6), las remesas que envían al país los peruanos residentes en el exterior son, juntando lo recepcionado formal e informalmente, de
aproximadamente 2 500 millones de dólares. ¡Cantidad apenas superadas por la actividad minera! Lo cual indica una capacidad laboral excelente.

Sin embargo, el país sigue siendo pobre, debido a que las relaciones sociales aun son de índole premoderna, y solo sustentan a una oligarquía parásita e ineficiente. Muy por el contrario, son los empresarios y trabajadores independientes, con su "cultura chicha" (informalidad crecientemente desinhibida), quienes hacen recordar los orígenes plebeyos de la burguesía europea. Ellos encarnan la esperanza de un Perú moderno (7).

"Proyecto socialista es viable en el Perú".
Por último, recordando que, según Marx, "un paso adelante en el movimiento real vale más que miles de programas", Ballón manifestó que un proyecto socialista modernizador es viable en el Perú. Esto, debido a que existe una franja de la población que vive de su propio trabajo, y no parasitan el Estado (como los que viven de exoneraciones tributarias), que tenderían a ser sus expositores más adecuados. Sólo faltaría deslindar con las opciones inconsecuentes a este proyecto de modernización, y de acuerdo al socialismo clásico, actuar convencidos de que "tenemos al capitalista (y al oligarca) del pescuezo, sólo falta apretarlo".

x FRANCISCO RAMOS

Notas
(1) Vea la publicidad realizada para este evento en nuestro site Intercambio Filosófico: "Viernes Filosófico: Filosofía, Liberalismo y Socialismo".

(2) Magister en filosofía. Profesor asociado de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la UNMSM. Ha publicado ensayos y artículos sobre temas de filosofía política y epistemología de las ciencias sociales. Actualmente dirige el Fondo Editorial de la UNMSM.

(3) Los privilegios, el clientelaje y las estructuras verticales derivadas de la sociedad antigua cedieron el paso a la construcción, en la modernidad, de una sociedad civil donde priman las relaciones de interés y el afán de
lucro individual. Desde esta perspectiva, el Estado se ve como un "Leviatán" abusivo, que hay que vigilar de cerca, y al que hay que "quitarle poder", de cualquier modo.

(4) Para los socialistas, el Estado debe extinguirse progresivamente. En esto subyace un nuevo desacuerdo con el liberalismo, que incluso en sus versiones más radicales se limita a otorgar a la sociedad civil una función opositora dentro del orden establecido, que garantice el pleno equilibrio entre derechos y deberes.

(5) Flores Galindo, Alberto: "La tradición autoritaria: violencia y democracia en el Perú". Lima, Asociación Pro Derechos Humanos (APRODEH) y SUR-Casa de Estudios del Socialismo, agosto de 1999. Ver la reseña del libro.

(6) Altamirano, Teófilo: "La migración en el Perú, 1980-2005" [ver una entrevista reciente a este autor realizada por El Comercio de Lima, el 26 de abril de 2006].

(7) A estos emprendedores, de acuerdo a lo afirmado por Ballón, tendería a beneficiar un eventual TLC con los EE. UU., que sin embargo sería fuertemente resistido por sectores conservadores, que subsisten de los privilegios como "premio" a su incapacidad empresarial. Ellos serían los más interesados en retratarlo como una lucha entre el Estado y "los más pobres", cuando en realidad se trataría de luchas entre grupos de
poder (el Estado burocrático contra los empresarios algodoneros, los azucareros, pesqueros, etc.), alejadas de los intereses de los verdaderos generadores de la riqueza en el Perú.

ENLACES RELACIONADOS:
Algunos artículos de José Carlos Ballón en la ínternet:

Artículos de José Carlos Ballón en la revista Logos Latinoamericano (Instituto de Investigaciones del Pensamiento Peruano y Latinoamericano-UNMSM, Lima-Perú)