martes, 4 de agosto de 2009

GUILLERMO GIACOSA: "LOS ARTÍCULOS PÉTREOS"


Los artículos pétreos

Guillermo Giacosa
Perú 21 Online, 4 de agosto de 2009

En la Edad Media, la coherencia de los postulados políticos y filosóficos era incontestable. ¿Qué buen cristiano –no existían ciudadanos en el sentido lato del término– podía oponerse a tan bella y sensata construcción intelectual?

Decía así: “Los campesinos trabajan para todos, los soldados luchan por todos, los sacerdotes rezan por todos y el rey reina para todos”. ¿No es hermoso? Estoy seguro de que a nuestro Juan Luis le encantaría regresar a esos viejos buenos tiempos. Pero lo único que no ajustaba bien era la desproporción de las responsabilidades: campesinos que se parten el lomo, soldados que arriesgan sus vidas, frailes que se rascan la panza –entre oración y oración– y un rey cuya risa debería resonar sobre todo el espacio de su reino, por ser él la cima de tan extraordinaria pirámide.

No diré que Honduras llegó a tales extremos, y no porque no haya reyes, ya que un pequeño sector de la sociedad los ha reemplazado en cuanto a beneficios y privilegios. Honduras sustituyó la construcción intelectual medieval con sus 'artículos pétreos’ que, contradiciendo al gran Heráclito y al impredecible mundo actual en continuo cambio, decidieron hacer una Constitución con esos maravillosos 'artículos pétreos’, es decir, inamovibles, eternos, intocables que, según creen, los ponen a salvo de los cambios que la historia pueda reclamar. Más que principios que consagrasen la dignidad humana –que sí debería ser una consideración universal–, estos artículos están destinados a consagrar la injusticia en el tercer país más pobre de América Latina y que lo es, precisamente, por esa injusticia de la que su propia Constitución no le permitirá jamás escapar.

Dicho de otra manera: los ricos serán siempre ricos, los pobres serán siempre pobres, la bananera United Brands –Chiquita– seguirá llevándose el bocado de león del ingreso nacional, y la última palabra la tendrá siempre la Embajada de EE.UU. No lo dicen así los 'artículos pétreos’, pero es como si lo dijeran pues, no pudiendo alterarse ni un ápice la situación que creó esta estructura, es imposible que ella cambie. A menos que haya una revolución o que algún presidente sensible, como Zelaya, proponga hacer una consulta para permitir que en la próxima elección se incluya una urna que consulte a los ciudadanos sobre las reformas a las que aspiran.

Esa consulta que solo pedía permiso para otra consulta terminó con Zelaya, en piyamas, en Costa Rica. No era para reelegirse, pues la segunda consulta, donde sí se plantearía la reelección, era el día en que Zelaya abandonaba el poder y no era candidato a otra cosa que a pasar a la historia por haber aumentado en 60% el salario mínimo y otras conquistas que no alteraron el orden capitalista del pequeño país, pero que sí indignó al poder económico que se ha enriquecido explotando la mano de obra barata y silenciosa que brinda esa nación –mucho antes de que se hablara de flexibilidad laboral–. Y una última: 'los pétreos’ ya fueron violados varias veces, incluso por quienes acusan hoy a Zelaya.

No hay comentarios.: