miércoles, 29 de julio de 2009

GUILLERMO GIACOSA: "PARA PENSAR LA CRISIS (2)"


Para pensar la crisis (2)

Guillermo Giacosa
Perú 21 Online, 29 de julio de 2009

Del artículo de la BBC publicado ayer, lo último era:

"La ley de la oferta y la demanda ejerció un reinado absoluto en la formulación de la política económica de las últimas tres décadas. Según el pensamiento clásico, la oferta y la demanda funcionan como un perfecto sistema autorregulado que tiende al equilibrio perfecto y cuenta con un regulador infalible: el precio. A mucha demanda y poca oferta de un producto, el precio sube hasta alcanzar la suma que el mercado puede pagar por ese bien."


Y agregaba:


"A la inversa –poca demanda, mucha oferta–, el precio disminuye hasta que alguien lo adquiere, convencido de que no lo va a encontrar más barato. Ni el Premio Nobel otorgado al economista Joseph Stiglitz por su investigación sobre el papel que la información cumplía en este mercado –la información que tenían los miles o millones de integrantes de un mercado particular no era perfecta y, por tanto, el precio reflejaba otras variables– destruyó esa confianza ciega en este funcionamiento autorregulado. La premisa teórica era esta: ¿qué mejor que desregular todo y dejar que el mercado se encargue de los equilibrios económico-sociales? Pero, al parecer, la realidad económica está llena de fenómenos impredecibles. En las llamadas burbujas, como la inmobiliaria de las hipotecas 'subprime’ que desató la actual crisis, ¿dónde está el mecanismo autorregulador del mercado? ¿Reflejaba el precio de la propiedad –siempre al alza– la situación de la demanda y la oferta? La conclusión más obvia es que demanda, oferta y precio forman parte de un mecanismo económico-social infinitamente más complejo que esa simplificación que se ha aplicado durante tanto tiempo."

Luego, la BBC aborda otro punto:

2. Crisis del racionalismo de mercado. Las preguntas anteriores ponen en duda una premisa fundamental de la ley de la demanda y la oferta: el racionalismo de los mercados. El ser humano busca la racionalidad económica y filosófica desde hace mucho tiempo. La planificación económica que hizo furor después de la crisis del 29 y de la posguerra buscó sintonizar la producción y el consumo con las necesidades de una sociedad. Con el derrumbe del comunismo, el mercado se impuso como única lógica global. Según esta ideología, el mercado era racional y eficiente para asignar recursos, tanto en el ámbito laboral como productivo y financiero. La debacle mostró que el mercado tiene la misma dosis de irracionalidad, capricho e imprevisibilidad que cualquier individuo o grupo humano. Lo que nos enfrenta a un problema inquietante: si los mercados o el Estado no son la base de un funcionamiento socioeconómico racional, ¿quiere decir que estamos a merced de los elementos?

3. Consecuencia axiológica: teoría de los valores. Esta aparente contradicción se complementa con una crisis de fundamentos éticos. Desde los años 80 y, en particular, con la caída del Muro de Berlín, se impuso un individualismo a ultranza que se basaba en una teoría del egoísmo como valor organizador ideal de una sociedad.

1 comentario:

Carlos Pastor dijo...

Resulta curioso que la BBC en el pasado ha merecido calificativos como "estupida" de su parte, aparte de ser un medio de comunicacion "falto de dignidad y honestidad intelectual" y esta aqui usted dedicandole toda una columna a un trabajo producido por la BBC. Deja usted muy claro quien es aqui el intelectualmente deshonesto.